29 dic 2017

G. Punto. Concierto n. 5. Segundo movimiento. Adagio.



Movimiento lento, en adagio, su tonalidad es Fa menor, ésta hace que la mano permanezca dentro del pabellón continuamente, pues las notas correspondientes a la armadura están escritas en el pentagrama para que sean tocadas. Exclusivamente, el Sib hay que tocarlo con la mano totalmente fuera. En este adagio quedan excluidos los vientos y la base del acompañamiento está centrada en la cuerda. Está escrito en ¾ y tiene forma ternaria, A – B – A. En cuanto a la interválica utilizada en este movimiento, predominan las 3as y las 8as, sin embargo, lo más utilizado son los intervalos diatónicos y cromáticos, hasta tal punto que podemos ver compases completos donde todas las notas son tapadas.

En este movimiento, Punto, introduce notas como el lab4, el lab5 y reb4, y aunque en el tiempo anterior hubiera aparecido el do#4, Domnich, recomienda que sean tapadas de diferente manera. Con respecto a la nota lab4 expone que, «si en una canción o un acompañamiento lento, esta nota va precedida de un sol natural, también se puede obtener sin obstruir el pabellón, pero abriendo un poco más que las notas no tapadas».1 En referencia a esta última frase, se entenderá que es con la mano en posición normal, abriendo un poco más la mano sin llegar a sacarla completamente del pabellón.


Es interesante tener esto en cuenta a pesar de que ninguno de los lab4 que aparecen tienen un Sol natural delante, pero sí que aparecen con una nota abierta, en este caso el do5. Se podría pensar que si lo que se busca para interpretar el lab4 abierto es una nota abierta que lo preceda, este Do podría ser útil para ello, pero al ser un intervalo mayor que el de una segunda, complica seriamente conseguir tal propósito, pues conseguir modificar la afinación en medio tono con tan solo abrir un poco más la mano, es posible en un intervalo de segunda ascendente, ya que al sacar la mano el instrumento se sube.

A continuación, se puede ver el ejemplo descrito anteriormente. 

Ilustración 1 Concierto nº 5 - Punto - Adagio, cc. 4 a 5 y 48 a 49.
(Haz Click en la imagen para escuchar el audio)*

No obstante, el lab5 aunque también está escrito con un intervalo ascendente desde el do5, lo encontramos en el compás 16 precedido de un sol natural, pero Domnich, no comenta nada sobre el Lab de esta octava, cosa comprensible, más si cabe, debido a que el armónico de La natural concretamente, el la5, es un armónico bajo de por sí, y podría tocarse con la mano completamente fuera del pabellón, pero hay dos razones para no hacerlo, la primera no está tan bajo para ser un la bemol y que suene afinado, y la segunda, Domnich en sus reglas para la posición de la mano derecha, dice «Cerrando el pabellón por completo».2 En cambio, si esa nota fuese Sol#, sí que dice que la mano debe estar fuera.

De este modo, y siguiendo las instrucciones del señor Domnich, todos los Lab serán tocados cerrando completamente el pabellón.

                              Ilustración 2 Concierto nº 5 - Punto - Adagio, cc. 15 a 16.                                                                                        cc. 7 a 8 y 51 a 52. 
(Haz Click en la imagen para escuchar el audio)*




Algo asombrosamente llamativo es la forma en la que da cabida a las notas con la mano completamente fuera, más teniendo en cuenta que estamos en una tonalidad menor y es necesario tapar el pabellón para producir las notas, lo que hace que el sonido del instrumento pierda potencia y brillantez y la mano completamente fuera infiere en la atmósfera que se crea cuando la mano está dentro. Con esta técnica compositiva se buscan dos cosas, una, imprimir tensión armónica a la obra y dos, hacer un crescendo sin necesidad de escribirlo con palabras.

Ilustración 3 Concierto nº 5 - Punto - Adagio, cc. 24 a 30.
(Haz Click en la imagen para escuchar el audio)*

Como se decía al comienzo de este apartado, en este movimiento hay compases completamente con notas tapadas que escapan de ese piano forzado hacia un fuerte claramente buscado para terminar haciendo un diminuendo hacia el final de frase. Sólo un experto trompista conocedor de los entresijos de la técnica de mano es capaz de conseguir algo así sin escribir ni una sola palabra bajo las notas. Solo hay que fijarse en las notas que están cerradas y abiertas para deducir las dinámicas. En este caso sería, 𝑝 – 𝑐𝑟ℯs𝒸 – 𝑓 – 𝓂𝑓 – 𝑝 – 𝑓 – 𝓂𝑓 – 𝑝 – 𝑓 – 𝓂𝑓 – 𝑝.


La búsqueda de la tensión armónica también la usa Punto en su concierto y qué mejor que hacerlo en un movimiento lento en tonalidad menor, así que a partir del compás 31 comienza la orquesta esa tensión armónica al finalizar la melodía anterior que aparece más arriba, para acabarla en el 36 la trompa y volver nuevamente a la estabilidad de la tonalidad principal.

Ilustración 19 Concierto nº5 - Punto - Adagio, cc. 35 a 39.
(Haz Click en la imagen para escuchar el audio)*

Esa estabilidad armónica vuelve con la anacrusa del compás 49 y tras presentar la misma melodía de ocho compases de comienzos del movimiento, hace una variación en la que aparecen apoyaturas y grupetos con los mismos sonidos usados en el primer movimiento como los compases 168, 172 y 173, tan sólo a cuatro compases del final. Estos últimos cuatro compases dejan morir el movimiento con un pianísimo escrito junto a unas notas del registro grave que hay que producir con la presión de los labios, como es el caso del si2.


Debido a que este Si, hay que atacarlo directamente y no le precede ninguna nota abierta es aconsejable ayudarse con la mano derecha cerrando un poco el pabellón para que el aire consiga un poco de resistencia y se concentre mejor el sonido.

Ilustración 20 Concierto nº5 - Punto - Adagio, cc. 64 a Fin.
(Haz Click en la imagen para escuchar el audio)*





* Todos los audios son con trompa moderna, el intérprete es el trompista Barry Tuckwell.
[1] Heinrich Domnich. Méthode De Premier et de Second Cor, (París: Conservatorie Impérial de Musique, 1807), 19. «Si dans un chant ou un accompagnement lent, cette note est précédée d'un G naturel, elle peut également se prendre juste sans boucher le pavillon, mais en ouvrant la main un peu plus que pour les notes non bouchées».
[2] Ibíd., 18. «Boucher tout à fait le pavillon».

No hay comentarios:

Publicar un comentario