El
principal objetivo de este trabajo fin de máster es el de conocer la técnica
interpretativa de Giovanni Punto y por qué fue una persona fundamental en el
desarrollo de ésta. Este genera objetivos secundarios que nos llevan a hacer
una búsqueda en el material de aquella época para comprender el uso de la
técnica de mano, el trabajo técnico llamado actualmente flexibilidad y comprender
las características de un trompa agudo y un trompa grave en el clasicismo.
Así
pues, los datos revelan que ni Punto ni Hampel hablaron de la técnica de la
mano derecha dentro del pabellón, siendo el propio Hampel el creador de ésta y Punto
el que desarrolló su método escribiendo unos estudios diarios posteriormente.
Que no la mencionen nos aporta dos hipótesis, que esta enseñanza se hiciese de
viva voz y no fuese necesario escribirlo, o que, como considera Pegge, fuera un
secreto de los trompistas Bohemios tan bien guardado que sólo lo conocieran
ellos y ni mucho menos quisieran publicarlo. Esto abre nuevas vertientes a esta
investigación que podrán ser valoradas para futuros estudios.
Por
otra parte, queda visible que Giovanni Punto fue fundamental en el uso de la
trompa natural en cuanto a su paso como concertista a través de Europa y las
alabanzas que recibió a lo largo de su vida, incluyendo su propio funeral. Que
fuese elegido por el constructor Raoux en ser obsequiado por una de sus tres
trompas de plata deja constancia de que sin duda era uno de los mejores.
Se ha
confirmado que la primera persona en discutir sobre la técnica de mano y el
descubrimiento de Hampel fue Heinrich Domnich y que lo hizo en la reseña
histórica de su Methode de
Premier et de Second Cor, además, tras su exhaustiva explicación de
cómo producir cada una de las notas en una extensión de tres octavas, se ha
realizado una aproximación pedagógica de la técnica de mano para interpretar el
Quinto concierto para trompa principal
de Giovanni Punto.
No sólo se
han atendido las necesidades de la técnica de mano, sino que los trabajos de
Hampel-Punto y Punto han llevado a observar la similitud de sus ejercicios con
la obra, de este modo, y tras analizarlos meticulosamente, se han propuesto
diversos ejercicios para la consecución de determinados pasajes del concierto
que demandaban ser ejecutados bajo un estudio previo.
Tras el
estudio teórico de la técnica de mano del método de Domnich se ha puesto en
práctica en una réplica de Cor Solo del año 2012 y se ha podido comprobar que todo
lo expuesto se puede alcanzar sin mayor problema, a pesar de que algunas
posiciones son más cómodas que otras, cosa que probablemente sea debido a que
el tamaño de la mano pueda ser diferente. Por otra parte, hay determinados pasajes que permiten
modificaciones en la posición de la mano y que resultan con mejor afinación.
Los compases de cacería con mordentes de la4 en los que la mano
debería cerrar en tres cuartas partes el pabellón, pueden ser tocados sin
necesidad de ello, y con la mano en posición normal se logra con la ayuda de la
velocidad del aire.
El Fa# en la quinta línea queda desafinado
hacia abajo y es más cómodo tocarlo con la mano fuera del pabellón, ya que,
como se ha explicado, corresponde con el parcial 11º que implica ser un
armónico alto y que con la posición normal de mano no llega a sonar Fa#, pero
si se deja el pabellón completamente libre queda afinado como Fa#.
Este estudio puede ser llevado a cualquier
música escrita para Cor Basse en esta época, así vemos como, no sólo los Conciertos de W. A. Mozart o la Sonata de L. v. Beethoven citados en
este trabajo, la Sonate Es Dur para
trompa y piano op.28 y Sonate E minor
op.44 de Franz Danzi, el Cinquiéme
Concerto á cor principal de Frederic Duvernoy (1765 – 1838) o los Conciertos para trompa o los conciertos para
dos trompas de Francesco Antonio Rossetti (1750 – 1792) con especial
interés el Concierto en Mib Mayor,
C48/III:37, pueden ser estudiados del mismo modo y con las mismas pautas
del señor Domnich.
Y no solamente puede ser trasladado a las
obras para solista, sino que los compositores clásicos y románticos han concedido
grandes solos orquestales y operísticos para el trompista natural como, las Sinfonías de L. v. Beethoven, W. A.
Mozart en Idomeneo, Gioachino Rossini
(1792 – 1868) en su Barbero de Sevilla,
La Gazza ladra o el turco en Italia
o la evocación de la trompa alpina de
la Primera sinfonía en Do menor Op. 68 de
Johannes Brahms (1833 – 1897). Hay Mucha música escrita para este instrumento
carente de mecanismo aun existiendo los instrumentos con válvulas.
Tras este estudio se ha podido comprobar que
la posición de la mano derecha que propone Domnich y las propuestas de sus
contemporáneos son aplicables en toda la música escrita para la trompa natural
desde este periodo hasta la actualidad. Así pues, la realización de una
comparativa entre las diferentes propuestas de los principales profesores de
trompa natural, como por ejemplo los citados por Pegge en su libro y mostrados
en el Anexo V de este estudio, nos muestra una nueva línea de investigación en
torno a la técnica de mano.
Además de la técnica de mano, ha surgido el
tipo de boquilla ideal para el Cor Basse. Teniendo en cuenta que hoy día las
boquillas no se fabrican con los mismos materiales se podría trabajar sobre
ello con las actuales boquillas debido a que se pueden conseguir las medidas y
la forma de las usadas en el siglo XVIII. Aun así, existen constructores que al
igual que hacen réplicas de instrumentos antiguos, construyen boquillas a la
antigua usanza.
Este trabajo ha estado apoyado en todo
momento en un blog personal en el que se ha ido volcando la información
resultante de este proyecto con una intencionalidad clara, dar a conocer a los trompistas
naturales noveles un aporte basado en la aplicación y el conocimiento de los
primeros métodos y tratados además de profundizar en una de las escuelas de
trompa más importantes de la historia de la música y en la figura más
significativa de aquella época.
Además, queda patente la intencionalidad de
continuar este trabajo y avanzar en el estudio de la interpretación de la
trompa natural, estudio, que actualmente continúa activo a nivel internacional.
Así pues, los nuevos enfoques y perspectivas surgidas a lo largo de esta
investigación pretenden ser representadas a través de este blog.
Por otra parte, todo lo referente a la
exégesis será aplicado con la trompa natural para apreciar la sonoridad y la
belleza de un instrumento que cautivó a los grandes compositores y que a pesar
de la evolución de éste se negaban al uso de las nuevas tecnologías. El
compositor alemán, Robert Schumann (1810 – 1856) fue un admirador del sonido de
la trompa afirmando que, «la trompa es el alma de la orquesta».
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